Cómo forzar el cierre de una aplicación en Windows 10

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Forzar el cierre de una aplicación en Windows 10

Cuando se utiliza una computadora con sistema operativo Windows 10, es común que en algún momento alguna aplicación se quede congelada o deje de responder. Esto puede resultar muy frustrante, especialmente si estás en medio de una tarea importante. Afortunadamente, existe una forma de forzar el cierre de una aplicación en Windows 10 cuando esto sucede, y en este artículo te explicaremos cómo hacerlo.

Usando el Administrador de tareas

El Administrador de tareas es una herramienta que está disponible en todas las versiones de Windows, incluyendo Windows 10, y es muy útil para administrar aplicaciones y procesos en ejecución en tu computadora. Para forzar el cierre de una aplicación congelada en Windows 10 utilizando el Administrador de tareas, sigue estos pasos:

Paso 1: Abrir el Administrador de tareas

Para abrir el Administrador de tareas, puedes hacer clic con el botón derecho del ratón en la barra de tareas y seleccionar «Administrador de tareas» en el menú que aparece. También puedes presionar las teclas Ctrl + Shift + Esc al mismo tiempo para abrir el Administrador de tareas de forma rápida y sencilla.

Paso 2: Identificar la aplicación congelada

Una vez que el Administrador de tareas esté abierto, verás una lista de todas las aplicaciones y procesos en ejecución en tu computadora. Busca la aplicación que se ha quedado congelada y que deseas cerrar forzosamente.

Paso 3: Forzar el cierre de la aplicación

Haz clic con el botón derecho del ratón en la aplicación congelada y selecciona «Finalizar tarea» en el menú que aparece. Windows intentará cerrar la aplicación de forma normal, pero si no responde, forzará su cierre.

Usando el comando Taskkill

Otra forma de forzar el cierre de una aplicación en Windows 10 es utilizando el comando Taskkill en el símbolo del sistema. Este método es útil si por alguna razón no puedes abrir el Administrador de tareas o si prefieres utilizar comandos en lugar de la interfaz gráfica. Sigue estos pasos para forzar el cierre de una aplicación utilizando el comando Taskkill:

Paso 1: Abrir el símbolo del sistema

Para abrir el símbolo del sistema en Windows 10, puedes buscar «símbolo del sistema» en el menú de inicio y hacer clic en el resultado correspondiente. También puedes presionar las teclas Windows + R, escribir «cmd» y presionar Enter.

Paso 2: Identificar el ID de proceso de la aplicación

Una vez que el símbolo del sistema esté abierto, es necesario identificar el ID de proceso de la aplicación que deseas cerrar. Puedes hacer esto utilizando el comando Tasklist para ver una lista de todos los procesos en ejecución y encontrar el ID de proceso correspondiente a la aplicación congelada.

Paso 3: Forzar el cierre de la aplicación con Taskkill

Una vez que tengas el ID de proceso de la aplicación congelada, utiliza el comando Taskkill seguido del ID de proceso para forzar su cierre. Por ejemplo, si el ID de proceso es 1234, deberás ejecutar el comando «taskkill /F /PID 1234» en el símbolo del sistema.

Reiniciar la computadora

Si ninguna de las dos opciones anteriores funciona para forzar el cierre de la aplicación congelada en Windows 10, siempre puedes optar por reiniciar tu computadora. Aunque este método no es el ideal, ya que perderás cualquier trabajo no guardado, a veces es la única solución cuando una aplicación está completamente bloqueada.

Evitar que las aplicaciones se congelen

Si constantemente te encuentras con aplicaciones congeladas en Windows 10, puede ser una señal de que algo no está funcionando correctamente en tu sistema. Aquí hay algunos consejos para evitar que las aplicaciones se congelen:

– Mantén tu sistema operativo y todas tus aplicaciones actualizadas para asegurarte de que estén funcionando con la última versión y parches de seguridad.
– Evita tener demasiadas aplicaciones abiertas al mismo tiempo, ya que esto puede sobrecargar la memoria de tu computadora.
– Considera utilizar un programa de limpieza de registro para eliminar archivos temporales y desfragmentar el disco duro.
– Escanea tu computadora en busca de malware y virus utilizando un programa antivirus confiable.

Conclusión

Forzar el cierre de una aplicación congelada en Windows 10 es una tarea sencilla si sabes cómo hacerlo. Tanto el Administrador de tareas como el comando Taskkill son herramientas útiles para resolver este problema cuando una aplicación deja de responder. Sin embargo, es importante recordar que forzar el cierre de una aplicación puede resultar en la pérdida de datos no guardados, por lo que siempre es recomendable guardar tu trabajo con regularidad para evitar contratiempos. Si sigues experimentando problemas con aplicaciones congeladas en Windows 10, considera buscar ayuda de un profesional de IT para identificar y resolver cualquier problema subyacente en tu sistema.

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