Guía clínica para el trastorno por déficit de atención

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El trastorno por déficit de atención (TDA), también conocido como trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), es una condición neurológica que afecta principalmente a niños y adolescentes, aunque también puede presentarse en adultos. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el TDA es uno de los trastornos mentales más comunes en la infancia y puede tener un impacto significativo en la vida de quien lo padece si no es tratado adecuadamente.

Para ayudar a los profesionales de la salud y a las familias a entender, identificar y tratar el TDA, se han desarrollado guías clínicas basadas en la evidencia científica y las mejores prácticas.

En este artículo, trataremos de manera detallada los aspectos más importantes de estas guías, desde la identificación de los síntomas hasta las opciones terapéuticas disponibles.

Identificación del TDA

El TDA se caracteriza por una dificultad para mantener la atención, impulsividad y una excesiva actividad motora. Sin embargo, estos síntomas no siempre son tan evidentes como se podría pensar y pueden variar mucho de una persona a otra. Por lo tanto, es importante que los profesionales de la salud estén familiarizados con las distintas presentaciones del trastorno para poder realizar un diagnóstico preciso.

La identificación temprana del TDA es clave para un mejor pronóstico y para evitar posibles complicaciones en el futuro. Por ello, las guías clínicas recomiendan que los profesionales de la salud realicen una evaluación exhaustiva a niños sospechosos de tener TDA. Esta evaluación debe incluir una revisión de los antecedentes clínicos y familiares, una exploración física y una entrevista con los padres y el niño o adolescente.

Diagnóstico del TDA

El diagnóstico del TDA es clínico y se basa en los criterios establecidos por el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5). Según este manual, para ser diagnosticado con TDA, el individuo debe presentar síntomas de inatención, hiperactividad e impulsividad que sean persistentes, que se manifiesten en distintas situaciones y que causen un deterioro en su funcionamiento en el hogar, la escuela o en otras áreas de su vida.

Es importante destacar que una adecuada evaluación debe descartar la presencia de otras condiciones o trastornos que puedan estar presentes en conjunto con el TDA. Por ejemplo, el trastorno de ansiedad y el trastorno del espectro autista pueden presentar síntomas similares al TDA, por lo que es fundamental realizar una evaluación integral.

Consultar con un especialista siempre será de gran importancia. Sin embargo es posible que en muchos casos los padres no posean seguro médico o los recursos para llevar al niño a un especialista para que sea evaluado. En estos casos, en Colombia existen distintos convenios que pueden ayudarle.

La red Sanitas es una de las instuticiones más importantesdel país y que tienen distintos convenios de salud. Aquí puede consultar las clínicas y hospitales que tienen convenio con sanitas.

Tratamiento del TDA

El tratamiento del TDA puede incluir una combinación de enfoques farmacológicos, terapia conductual y psicoeducación para los padres y el niño o adolescente. Cada caso debe ser evaluado de manera individual y el tratamiento debe ser adaptado a las necesidades y características de cada persona.

En cuanto al tratamiento farmacológico, las guías clínicas recomiendan el uso de medicamentos estimulantes, como el metilfenidato y el dextroanfetamina, como primera línea de tratamiento para el TDA. Estos medicamentos han demostrado ser eficaces en el control de los síntomas y pueden mejorar significativamente la capacidad de atención, la impulsividad y la actividad motora.

Por otro lado, la terapia conductual se enfoca en enseñar a los niños y adolescentes habilidades para gestionar su conducta y mejorar su capacidad de atención. Algunas de las técnicas utilizadas son la modificación de conducta, la terapia cognitivo-conductual y el entrenamiento en habilidades sociales. Esta terapia también puede ser útil para los padres, ya que les ofrece herramientas para manejar y mejorar la relación con su hijo.

La psicoeducación es una parte esencial del tratamiento del TDA, tanto para los padres como para el niño o adolescente. A través de la educación, se busca que los padres comprendan mejor la condición de su hijo, aprendan a gestionar los síntomas y sepan cómo apoyarlo en su desarrollo académico y social. Por otro lado, el niño o adolescente también puede aprender sobre su trastorno, cómo puede afectar su vida y cómo puede manejar sus síntomas.

Medidas complementarias

Además de las opciones de tratamiento mencionadas anteriormente, también existen algunas medidas complementarias que pueden ayudar a mejorar los síntomas del TDA. Por ejemplo, una alimentación saludable, que incluya una variedad de alimentos nutritivos y evite los alimentos procesados y con alto contenido de azúcar, puede tener un impacto positivo en la salud mental y en el comportamiento.

Asimismo, la práctica regular de actividad física y técnicas de relajación, como el yoga y la meditación, pueden ayudar a reducir la ansiedad y mejorar la concentración y la atención. Es importante tener en cuenta que estas medidas complementarias no reemplazan un tratamiento médico adecuado, pero pueden ser beneficiosas como una herramienta adicional.

El apoyo de la familia y el entorno es fundamental en el manejo del TDA. Es necesario que los padres, maestros y otros adultos cercanos al niño o adolescente estén informados sobre la condición y puedan brindar un ambiente estructurado, previsible y libre de distracciones para ayudar al niño a desarrollar habilidades para gestionar su trastorno.

En conclusión, el TDA es una condición frecuente y con una alta tasa de éxito en el tratamiento, siempre y cuando se realice un diagnóstico adecuado y se siga una guía clínica basada en evidencia. La identificación temprana y el tratamiento adecuado pueden mejorar significativamente la calidad de vida de quienes viven con este trastorno. Si sospechas que tu hijo o algún familiar pueda tener TDA, no dudes en buscar ayuda de un profesional de la salud especializado.

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