El arte digital es una práctica que incorpora elementos digitales a la práctica tradicional del arte.
Ha tomado muchas formas diferentes en los últimos años, desde videoarte hasta ilustraciones creadas en programas informáticos.
A pesar de sus muchas variaciones, el arte digital ha tenido una presencia importante en el mundo del arte desde los primeros trabajos.
Esto ha conducido a grandes avances en el campo de la creación de obras de arte utilizando tecnología digital.
Esta historia explora los primeros experimentos con el arte digital y cómo estos han contribuido a las innovaciones modernas.
La evolución temprana del arte digital
El arte digital comenzó aun antes de la llegada de la computadora.
A mediados de los años 1960, varios artistas y diseñadores exploraron la interacción entre la creatividad y la tecnología, a menudo utilizando dispositivos mecánicos para crear obras maestras interactivas.
Estos experimentos discretos iniciales contribuyeron directamente a los desarrollos más innovadores del arte digital que vendrían.
Los primeros trabajos con computadoras
En los años 1970, la llegada de la computadora a la casa permitió a los artistas experimentar con una nueva forma de crear arte.
Artistas como Harold Cohen y Frieder Nake, utilizaron lenguajes de programación para crear obras de arte originales.
Estos artistas participaron en los primeros intentos de crear arte con computadoras, creando los primeros trabajos generativos y de programación de arte.
Nake y Cohen a menudo realizaron sus experimentos en un escenario académico. Crearon trabajos usando los dispositivos más avanzados disponibles en ese momento.
Estas obras tenían un énfasis potente en la geometría, el color y el sentido de la forma.
Eran trabajos importantes para el desarrollo de la disciplina, abriendo la puerta a la experimentación y la innovación más allá de esos límites.
Las innovaciones en el arte con computadoras
A medida que los ordenadores se volvieron cada vez más accesibles, los artistas empezaron a explorar lo que podían lograr con ellos.
Esto condujo a una explosión de innovaciones en la práctica del arte digital.
Artistas como Herbert W. Franke comenzaron a experimentar con estilos visuales abstractos, mientras que otros investigaban la interacción entre el usuario y las imágenes digitales.
En esta época, los artistas también comenzaron a explorar la interacción entre el usuario y sus trabajos, significaba que no solo el artista podía crear la obra, sino que los espectadores podían tener un papel activo en su interpretación.
Esta interacción fue un desarrollo clave en el desarrollo de la práctica artística digital, abriendo la posibilidad de tener experiencias únicas e intensas.
El arte digital expandido
Las innovaciones en el arte digital se aceleraron a medida que el hardware de computación se fue volviendo más poderoso.
A finales de los años 80, se podían encontrar dispositivos compatibles con computadoras personales más baratos y de mayor alcance.
Esto permitió a los artistas experimentar con éxito con una línea completa de herramientas interactivas, gráficas e incluso musicales.
El arte digital interactivo
En los años 90, el arte digital comenzó a pasar de ser una forma estática de arte a una experiencia completa, interactiva e inmersiva gracias al uso de tecnologías emergentes como juegos, gráficos por computadora, redes sociales y la web.
Esto permitió a los artistas crear obras que los espectadores pudieran interactuar y explorar de manera única.
Bien consciente de los límites de la tecnología, el arte digital comenzó a adoptar una variedad de formas, desde realidad virtual hasta imágenes generativas y multimedia interactivo.
Estas innovaciones presentaron oportunidades para crear experiencias artísticas en una escala completamente nueva, mucho más allá de lo que se podía imaginar con los primeros trabajos de arte digital.
De la evolución al crecimiento
En el siglo XXI, el arte digital vio una maduración significativa de su disciplina.
Esto fue posible gracias a la presencia de más artistas comprometidos en la práctica, y la mayor disponibilidad de herramientas de tecnología más sofisticadas y fáciles de usar.
Los artistas modernos tienen la libertad de explorar una amplia variedad de plataformas y herramientas para crear experiencias únicas.
Esto también ha abierto la posibilidad de mostrar el trabajo de manera aún más completa y convincente que antes.
Internet ha sido un punto de acceso popular para esto, convirtiéndose en un medio imprescindible para difundir el trabajo, además de una oportunidad para llegar a audiencias más grandes.
